BABY  BALLET

Considerado como Arte Escénica, el ballet requiere mucha concentración; a nivel psíquico y flexibilidad, coordinación y ritmo musical; a nivel físico. 

Por ello se recomienda que esta disciplina empiece a practicarse desde una edad temprana, los 3 o 4 años, que es cuando el aparato locomotor de los niños puede asimilar e interiorizar con más facilidad y soltura los movimientos y técnicas de la danza.


BENEFICIOS FÍSICOS

El ballet, además de arte, es un ejercicio que cuenta con múltiples y positivos beneficios, tanto físicos como psíquicos, para los niños, tales como:

 

  • El baile estimula la circulación sanguínea y el sistema respiratorio.
  • Favorece la eliminación de las grasas y mantiene un estado físico saludable.
  • Contribuye a corregir malas posturas. 
  • Ayuda a ganar elasticidad 
  • Desarrolla la Psicomotricidad: mejora la coordinación, la agilidad de movimientos, el equilibrio y los reflejos.
  • Colabora en el desarrollo muscular y la forma de la columna. 
  • Desarrolla la expresión corporal, el oído y la memoria. 

BENEFICIOS PSICOLÓGICOS

  • El ballet es un ejercicio muy rígido, que exige y enseña disciplina tanto física como mental, ayudando en el desarrollo de la personalidad de los niños.
  • Desarrolla la sensibilidad de los pequeños, permitiendo que fluyan sus sentimientos con total libertad.
  • Ayuda a la socialización de los niños más tímidos y a superar esa timidez.
  • Mejora la autoestima y reduce síntomas de estrés o ansiedad, aumentando la confianza del niño en sí mismo.